INTRODUCCIÓN DEL CURSO
Percibir el verdadero mensaje implícito en lo que comunican los clientes con su lenguaje verbal y corporal puede marcar la diferencia entre ser un excelente profesional que se gana fácilmente su confianza o ser solo del montón. Y no solo a nivel cliente externo, sino también internamente. No saber escuchar puede representar graves problemas a la hora de delegar, negociar e inspirar a tu equipo de trabajo. Escuchar es una habilidad que debe ser aprendida, ejercitada y evaluada.